1.0.- INTRODUCCIÓN
El siguiente vídeo «El Icono Bizantino I : La Tabla» es el primer vídeo de la serie completa y de larga duración del I al VI (que pueden consultar en esta misma página web en la sección correspondiente y en You Tube) en la que exponemos la teoría y práctica seguida en nuestro Taller. En estos vídeos podemos ver las distintas fórmulas de los materiales empleados por distintas escuelas iconográficas bizantinas (griegas, rusas, rumanas, copta etc.) así como estilos al «pincelado», «pequeño lago» etc.
El soporte es el apoyo o sostén de nuestra obra. En iconografía normalmente se emplea la madera como soporte.
La elección de la madera y la formación de la tabla sobre la que trabajaremos es muy importante ya que no debe presentar problemas de de alabeo, agrietamiento, rechazo de la humedad o cualquier otro defecto que pueda repercutir en la conservación del icono.
Aunque no preparemos nosotros mismos los soportes debemos de tener un mínimo conocimiento de la clase de madera que vamos a emplear, su estado de secado, la clase de bordes (si son cavados o falsos bordes), la conveniencia o no de emplear lengüetas, etc. Todo ello nos será necesario para poder seleccionar las tablas adecuadas.
No es extraño encontrar a la venta tablas que se dicen preparadas especialmente para iconos pero que no reúnen las mínimas condiciones: unas tienen un exceso de nudos o son muy resinosas o hidrófugas o no han finalizado el proceso de secado o presentan otros inconvenientes que no las hacen idóneas para nuestros soportes.
La elección del soporte de la obra iconográfica es pues uno de los factores más importantes a tener en cuenta para que la pintura y el dorado se conserven en perfectas condiciones.
La madera, es algo vivo que en un ambiente seco presenta contracciones y se deforma fácilmente, en ambientes húmedos, el efecto es el de expansión por lo que aumenta su volumen. Estos efectos de cambios de volumen van a repercutir directamente sobre la deformación, más o menos acentuada, de nuestros soportes.
El ataque que la madera puede recibir de los xilófagos habrá que tenerlo en cuenta, pero hoy en día es fácil prevenirlos, detectarlos y suprimirlos con los productos que tenemos a nuestra disposición en el mercado.
Actualmente la madera más empleada en el mercado es la industrial. Esta madera se obtiene por encolados conseguidos por generadores de encolados de alta frecuencia (por movimientos moleculares que alcanzan temperaturas de hasta 80º y secando la cola de dentro hacia fuera rápidamente).
La tabla para nuestras obras ha de ser de madera no grasa. Nunca emplear madera que no esté lo suficientemente curada. La humedad de la madera del árbol se tiene que reducir una quinta parte, como mínimo, para ser maleable. En nuestro caso después de adquirirlas solemos dejarlas secar dos años o más, para asegurarnos de un completo secado.
Para secar nuestra madera debemos tener en cuenta que: no hay que exponerla al sol, debe estar aislada del suelo, en un lugar ventilado y en forma de tablero y no de tronco hasta conseguir una humedad del 12%.
En los secaderos artificiales se produce un proceso de secado en el que humedad, temperatura, especie de madera y demás condiciones están adecuadas por el seguimiento de normas internacionales que nos garantizan en gran medida este necesario proceso para comenzar a trabajar con madera seca.
El conocimiento de la madera que necesitamos nos será imprescindible a la hora de encargar el soporte a nuestro proveedor: un almacenista, un carpintero de confianza o mejor, a un artesano iconógrafo que nos va a garantizar la idoneidad de la materia prima. Para sopesar esta idoneidad tendremos en cuenta la siguiente clasificación:
1.1.1.- MADERA NATURAL
Es la madera en la que esta materia prima es su único componente y proveniente directamente del tronco del árbol sin que se le haya aplicado ningún proceso industrial con aplicación de serrines, celulosa o colas.
Es la madera de mayor calidad, belleza, durabilidad, nobleza y por consiguiente más cara y difícil de encontrar en la actualidad a no ser que nos dirijamos directamente a los proveedores almacenistas.
El tilo es propio de las regiones templadas del hemisferio norte (Europa, Asia, Canadá, EE.UU). Es una madera clara, sin nudos, fina, sin vetas. No es una madera dura , se puede trabajar con la fresadora y/o el formón, con rapidez y limpieza. Es muy empleada en la talla y en la iconografía.
La abundancia de bosques de tilo en Rusia propició que esta madera se empleara frecuentemente. Su empleo en Rusia pasó a Francia debido al exilio de la nobleza rusa en la revolución y de allí a todas las escuelas iconográficas de influencia francófona.
En algunos de los países mediterráneos no es muy frecuente el utilizar el tilo ya que se encuentran dificultades en la adquisición del mismo en los proveedores habituales. En nuestro país es más común el empleo del pino aunque es una madera menos recomendada ya que presenta inconvenientes por su resinosidad, nudos y vetas.
1.1.2.- MADERA INDUSTRIAL
Se nos presenta como un producto acabado de madera a la que se han aplicado colas y otros materiales para conseguir una mayor durabilidad, que no se alabee y que carezca de nudos y vetas. Encontramos varios tipos:
1.1.2.1.- CONTRACHAPADO
Consiste en chapas de maderas encoladas alternando el sentido de la fibra. No interviene en su fabricación el empleo de serrines encolados (esto sucede en los aglomerados) por lo que el contrachapado se nos presenta con una calidad aceptable aunque según el uso para el que esté destinado la calidad de las chapas, la madera y el encolado serán diferentes.
Dentro de los contrachapados debemos distinguir:
- Contrachapado de exterior: aplicaciones no estructurales.
- Contrachapado de interior: no es de los más económicos por lo costoso de su fabricación pero sí el más apropiado para nosotros.
- Contrachapado náutico: hidrófugo, no recomendable para iconos ya que se emplean resinas especiales que tienen como base el cobre que repele la humedad y por tanto no soporta el contacto con el agua o la humedad lo que repercute directamente en el secado de los yesos, bol y pintura.
- Contrachapado estructural: no apropiado para los iconos ya que es para uso industrial.
Una vez asegurados de la clase del contrachapado apropiado, reconocemos, junto a una gran mayoría de iconógrafos actuales, que el contrachapado, si lo hemos elegido con el tipo de cola adecuado, es un soporte apto para nuestras obras ya que presenta unas ventajas incuestionables: se encuentra con facilidad, es una gran alternativa para principiantes, es de un bajo coste económico, los carpinteros la trabajan con efectividad, rapidez, etc. Y sobre todo no se curva aunque el tablero sea de grandes dimensiones. Algunos iconógrafos actuales afirman que si los antiguos hubieran conocido esta madera hubieran trabajado en ella.
No obstante no se debe descartar que en un futuro (como ha ocurrido en iconografía con otros materiales empleados en la época clásica) estas maderas pudieran presentar inconvenientes ya que la cohesión de los paneles podría no quedase asegurada.
Lo que si se puede asegurar es que no todo contrachapado es apropiado ya que aunque las chapas de madera naturales y encoladas entre sí dan un buen resultado pueden estar unidas por colas no adecuadas como hemos visto anteriormente.
Los tipos de cola son:la fenólica para el empleo del contrachapado en exteriores, la melamínica que no puede exponerse al agua y la uréica que es la indicada para interior.
Un inconveniente que presenta de entrada el contrachapado es que no puede cavarse y por consiguiente en lo que se refiere a la iconografía rusa (pintura por el procedimiento del charco) tendremos que emplear obligatoriamente la técnica del falso.
En resumen , no todo el contrachapado puede resultar igual de apto para nuestra obra ya que habrá que ver la calidad de la madera, su corte y acabado , el proceso al que se someta, el proceso de secado y el estilo del icono que vamos a realizar.
Una vez elegido el tipo de contrachapado más conveniente para nuestros iconos podemos, a partir de tableros simples, formar un tablero con un grosor según nuestras necesidades. En el siguiente ejemplo el grosor elegido es el correspondiente a la ventana de protección en la que lo situaremos como podemos apreciar en las dos imágenes siguientes:
1.1.2.2.- ALISTONADO
Los listones se se disponen intercalando sus caras cóncavas y convexas. De esta manera proporcionan la ilusión de que se compensarán para no producir alabeo. Se trata solamente de una falsa sensación ya que la madera se moverá de tal forma que entre se produzca en los listones una ondulación mucho más inconveniente que la curvatura natural de la madera.
Aquí podemos ver travesaños uniendo varios tableros con sus partes cóncavas y convexas dispuestas en distinta dirección. Al inconveniente que presenta el ensamblaje se le suma el que produce el intercalar las caras con distinta dirección en sus vetas.
Las partes cóncavas se secarán antes que las convexas y al estar pegados los listones se producirá posiblemente una deformación no solamente en la cabeza sino en el hilo del tablero.
Gran número de los carpinteros con los que hemos trabajado recomiendan vivamente para nuestros iconos la madera alistonada. Muchos de ellos opinan que los listones son de madera maciza y que el secado y encolado a grandes temperaturas con una maquinaria industrial apropiada hacen de esta madera algo perfecto para nuestro trabajo. Además resulta económico, fácil de encontrar en nuestras latitudes mediterráneas, es un material noble, ausente de nudos y vetas y posee gran resistencia al alabeo.
Nuestra experiencia no es acorde con las anteriores opiniones ya que si bien el agua no disolverá la fuerte cola de unión entre los tableros, la madera que está en contacto con dicha cola sí que podrá provocar apertura de grietas en las uniones de los listones.
Con respecto a la madera alistonada maciza, en nuestro taller hemos experimentado la aparición de grietas en algunos de nuestros iconos como vemos en la siguiente imagen:
1.1.2.3.- AGLOMERADO
Fabricado con virutas de madera encoladas a presión que no es posible fresar. Económico, de calidad ínfima, se descompone fácilmente con la humedad y/o el calor. Se hincha con la humedad sin posible recuperación.
Tenemos en el mercado aglomerado de una capa, de tres y granulado. Existe un aglomerado que para que repela la humedad se trata con una serie de productos químicos.
Todos los tipos de aglomerados son totalmente contraindicados para los iconos por su composición, su vista absolutamente antiestética y por su bajísima calidad.
1.1.2.4.- DM (DENSIDAD MEDIA)
Se puede trabajar como la madera maciza incluso con la fresadora para formar los bordes propios de los iconos. Se fabrica con elementos fibrosos, prensados al seco y aglutinados con un adhesivo sintético. Presenta una gran estabilidad. No se alabea. Se puede encolar fácilmente por lo que incluso se puede trabajar con este tablero haciendo los falsos bordes. El problema que plantea es su excesivo peso y sobre todo que al rechazar la humedad no facilita el secado de los productos que vamos a emplear en la iconografía, lo que perjudicaría fatalmente el acabado de la obra.
1.1.3.- OTRAS CLASIFICACIONES
La maderas también pueden clasificarse:
1.1.3.1.- POR SU DUREZA
Duras: nogal , ciprés, encina, tilo, acacia, abedul, Guinea (especialmente empleada en obras de grandes dimensiones. Son más caras y resistentes).
Muy blandas: okume, chopo, higuera, balsa, álamo, sauce, balsa…
Blandas: ciprés, avellano, abeto, abedul, pino silvestre, pino oregón… (Que sean blandas no quiere decir que sea madera menos resistente sino que hace referencia a que se puede trabajar mejor con ellas).
1.1.3.2.- POR SU RESINOSIDAD
La mayor parte de estas maderas corresponde a las maderas blandas: abeto, pino o cedro . Debemos evitar, en lo posible, toda madera resinosa ya que es muy abundante la cantidad y empleo en Europa. Procurar que no tenga demasiados nudos.
Haya: al cortarla es blanca, después adquiere un color rojizo claro, que pasa al rojo oscuro con el tiempo,es una madera dura y expuesta a la carcoma.
Fresno: en la madera de fresno no se aprecia la diferencia la capa blanda que forman los anillos anuales y la parte compacta y seca , es fina al tacto, no resiste bien las alternancias de humedad.
Álamo: crece en zonas templadas, de madera blanca que presenta una textura uniforme y fina. Presenta un buen secado, ligera, estable . Los anillos anuales de crecimiento son bien visibles.
Abedul: textura fina y parda, sin veteado, ligera , es la madera blanda más resistente, excelente para contrachapado.
Ciprés: es una madera fina a la vez que resistente y no resinosa , de duración larga.
Existen otras clasificaciones de la madera en las que no entramos por no ser de utilidad para nuestros trabajos.
1.2.- EL CORTADO
Al secarse la madera va perdiendo el agua y por lo tanto su volumen se ve reducido. Un buen secado de la madera (no solamente industrial sino el natural debido al paso del tiempo) es muy importante para comenzar a trabajar con nuestros iconos.
Junto al secado, también el cortado adecuado de la madera es importantísimo para la estabilidad de la misma.
El tipo de corte no depende de nosotros ya que los tableros vienen cortados de fábrica pero sí podemos distinguirlos para elegir los más adecuados entre los que se nos proponen los almacenistas.
Se puede proceder al cortado de las siguientes maneras:
1.2.1.- AL HILO
Las piezas que se obtienen de este corte resultan al hilo tanto por la cara como por el canto.
1.2.2.- PARALELAMENTE
Es el más económico. No es el más indicado para nuestras tablas ya que salen muy pocas de corte radial, es decir, con la veta perpendicular al canto y la mayoría con las vetas paralelas en la cara.
1.2.3.- AL MODO DE HOLANDA
Se corta el tronco en cuatro partes y de cada una de ellas se cortan tablones en radio. De los tablones que nos vienen cortados del serradero es el que mejor podemos emplear ya que salen tablas radiales (el mejor corte).
1.2.4.- HILOS OPUESTOS
Cortado en grandes planchas y de aquí cortando tablones radiales. Después de troceados, de los troncos se van sacando tablones radiales, no todos igual de perfectos en cuanto a la dirección de las vetas pero es un corte bastante empleado y con buenos resultados.
1.2.5.- DEFORMACIÓN DE LA MADERA SEGUN EL CORTE
Cortando el tronco en tablones lo que produce unas tablas de gran estabilidad. De esta manera reduciríamos casi totalmente el alabeo pero presenta el inconveniente de que se deshecha mucha cantidad de madera por lo que no suele emplearse. Los dos anteriores resultan los mas apropiados.
Por tanto, según el tipo de cortado tendremos pues unas tablas que se curven más o menos.
En la figura siguiente podemos apreciar como si el corte es radial el tablón se empequeñece al secarse pero no sufre deformaciones pero si el corte no es radial (resulta más económico pero se desperdicia más madera) sufre un alabeo más o menos acentudado.
De los tablones que nos vienen cortados de los serraderos por uno de los anteriores procedimientos nosotros cortamos la tabla una vez que tenemos en cuenta las proporciones que debemos seguir según sean figuras de medio o cuerpo entero y que indicamos con detalle en el punto 3.2.1.- Estructuras geométricas.
El cortado que normalmente realizamos en nuestros talleres es sencillo: el de los tablones para hacer las tablas a la medida que vayamos a necesitar para los iconos y también el corte de las tablillas para los bordes si los hacemos con falso borde.
La maquinaria y material que vamos a necesitar es muy simple:
Una sierra de mesa o de banco, una escuadra para sacar perfectamente rectangulares las tablas, lápiz y un gato sargento.
La sierra de mesa la empleamos para cortar las tablas de iconos de tamaño pequeño y mediano así como para cortar (longitudinal y transversalmente ) los listones que vamos a emplear en el falso borde. El empleo de esta sierra, como de cualquier herramienta, debe de cuidarse en extremo tomando toda clase de precauciones: no dejarla nunca enchufada, proteger ojos, cuidar respirar el polvo que produce y demás instrucciones que debemos leer atentamente en las instrucciones de las que viene provista cualquier maquinaria de este tipo.
Lo primero que debemos hacer es señalar con un lápiz la línea a seguir para cortar mediante una escuadra para que quede completamente recta la línea a continuación procedemos al corte de la tabla.
Se llama gato o sargento a una de las piezas de sujeción más empleadas en tablas pequeñas o medianas como la de la imagen. Se compone de una boca fija y otra a la que podemos mover y que gira alrededor de un eje. Es importantísimo trabajar siempre con las piezas fijas para relizar un buen trabajo y para evitar dolorosos accidentes. Como con todas las herramientas debemos cuidar su engrase para evitar su oxidación y deterioro y sobre todo cuidado con su empleo. El gato no es una herramienta peligrosa si cuidamos fijarlo bien para que no caiga con lo que podríamos tener un accidente en el pie mientras trabajamos.
1.3.- CONVEXIDAD Y CONCAVIDAD
La madera es una materia viva que sufre modificaciones a lo largo del tiempo, al secarse, al cambiar el medio ambiente en que se encuentre llegando a alabearse (es decir torcerse o curvarse). Para comenzar a trabajar en nuestros iconos debemos de tener en cuenta esta característica de la madera ya que la perfección de la obra (el cavado, los yesos, el dorado y la pintura) dependerá directamente de la calidad y curvatura de la tabla
La curvatura de la tabla vendrá determinada en gran parte por la clase de cortado que haya recibido (apartado 1.2.) pero además debemos cuidar el elegir las maderas secas, el mantenerlas durante el mayor tiempo que nos sea posible en depósito para asegurarnos de su secado y comprobar, si la tabla está compuesta por varios tableros, que todos ellos estén dispuestos en la misma dirección en lo referente a sus anillos convexos.
En la imagen anterior se aprecia que el corazón de los anillos de crecimiento miran hacia nosotros. Esta es la forma correcta de saber que esta es la cara en donde debemos hacer nuestro trabajo, es decir, por la parte convexa de la tabla. El dorado y la pintura se llevan mal con la parte cóncava.
Comprobamos que no todas las fibras son iguales. Al secarse cambian también sus dimensiones.
La parte de la madera que está más al exterior del tronco presenta mayores defectos de nudos y está más seca que la parte interior lo que produce que sus fibras se ensanchen menos.
Las fibras más interiores absorben más humedad y por tanto curvarán la madera: es la parte convexa de la que podremos, en parte, prevenir su alabeo si recibe más calor que la parte cóncava.
Existen algunas carpinterías especializadas en maderas y tablas preparadas para iconos de distintos tamaños, calidades y formas. Los responsables de estos comercios conocen las cualidades de las maderas que necesitamos. Debemos de poner mucha atención en el momento de la elección y aconsejarnos de verdaderos expertos.
El contrachapado deberá no ser hidrófugo (descartamos el contrachapado marino hidrófugo), de calidad en cuanto a densidad, capas y tipo de colas impermeables al agua y a la humedad en general.
El contrachapado okume es de peor calidad.
Los contrachapados filandeses de abedul son de gran resistencia y adecuada rigidez. Sólo tienen el inconveniente de no ser lo suficientemente gruesos, si bien se puede paliar este inconveniente para la tabla iconográfica aumentando el número de capas del mismo.
1.4.- ENSAMBLAJE
Una buena tabla deberá estar bien cortada, trabajada y ensamblada. Del ensamblaje depende directamente la conservación de la obra, que el levkas no se agriete y por lo tanto su durabilidad.
El ensamblaje consiste simplemente en la unión de dos o más piezas de madera aunque a partir del siglo XV con la moda de los trípticos de norte Europa, los retablos relicarios o los de hornacina y la ebanistería se complicaron de tal manera los trabajos el ensamblaje llegó a constituir una especialidad controlada e inspeccionada por los gremios.
El ensamblaje de los soporte era trabajo no de los doradores o pintores sino de los ensambladores que eran los encargados de elegir, preparar y ensamblar los soportes.
La mayoría de iconos, están compuestos por varias tablas que se han tenido que unir para llegar a una determinada superficie.
1.4.1.- TIPOS DE ENSAMBLAJE
1.4.1.1.- UNIÓN VIVA
Es el ensamblaje más empleado en iconografía. Casi todos los iconos vienen ensamblados de esta manera. Consiste en unir dos o más tablas.
Se emplea la cola de animal fuerte (ver 2.2.2.4) rayando primero los cantos con un cútex, escofina o una sierra de carpintero para que la cola agarre con mayor facilidad.
En la mayoría de los casos las tablas nos vienen unidas con colas industriales pero sin que conozcamos que este procedimiento podrá tener buenos resultados con el paso del tiempo.
1.4.1.2.- COLAS DE MILANO
Las colas de milano hay que cortarlas a medida con la sierra eléctrica . Forman unos ensamblajes de una gran resistencia debido a propia forma de las colas de milano.
Una vez cortadas se dibujan en la tabla y con una fresadora se rebaja la madera de la misma para terminar encajando las colas de milano empleando en este caso cola de animal fuerte.
1.4.1.3.- ESPIGAS DE MADERA
Las espigas de madera es un modo de ensamblaje más adecuado que los procedimientos en que se emplean grapas ya que el metal se oxida.
Consiste en formar unos orificios donde se introducen unas espigas como puede observarse en la imagen valiéndose para una perfecta unión de la cola de animal fuerte.
La tabla puede rajarse o bien en la unión de dos tablas o bien por las grietas que se forman en la madera . Para que no se produzcan este último tipo de grietas podemos emplear las lengüetas.
Las lengüetas son espigas prolongadas encajadas en el la ranura realizada en canto superior de una tabla previamente labrada.
Para que quede bien encajada la ranura se embadurna con cola de animal fuerte. El grueso de la espiga será en este caso un tercio del grosor del canto de la tabla.
1.4.1.4.- MEDIA MADERA
Se hacen unas ranuras en las dos o más tablas a unir tal como lo muestra la imagen de tal forma que una parte monte sobre la otra. Con un formón se alisan las ranuras.
Antes de la unión se rayan las partes a unir y se les aplica cola animal fuerte.
1.4.1.5.- GALLETA
Se hacen dos orificios rectangulares en cada parte de la tabla a ensamblar y en ellos se introducen unas “galletas” de madera. Previamente hemos rayado los cantos de la tabla a pegar y encolado con cola de animal fuerte.
Así como las colas de milano hay que hacerlas en el taller las galletas las encontramos a la venta de diferentes tamaños.
1.4.1.6.- ACANALADO
En el ensamblaje por acanalado se hacen unos surcos en los laterales de la madera de tal manera que se forma un entrante a lo largo de todo el borde de una de las tablas que se acopla con el saliente a lo largo de la otra tabla. Antes de la unión se rayan, como siempre, los bordes con un cútex, escofina o sierra de carpintero y se pega con cola de animal fuerte.
La unión viva es la que más empleamos en iconografía. Los demás ensamblajes son más propios de soportes de iconos grandes y de retablos
La eficacia y calidad de las maquinarias y tipos de colas actuales parecen garantizar en gran medida excelentes ensamblajes de unión viva aunque la cola que presenta más garantía comprobada es la animal fuerte por adaptarse a los movimientos de la madera. No sabemos, sin embargo, el resultado que pueden dar a largo plazo las colas industriales nuevas aunque de momento es muy bueno.
Aunque la madera esté seca, es una materia viva que se mueve por un cambio de temperaturas, de ubicación, etc. Estos “movimientos” son más intensos en los primeros años por lo que antes de comenzar el dorado y la pintura debemos dejar los soportes secar bien.
Para el ensamblaje podemos servirnos de la ensambladora es una máquina endereza y pone a escuadra las tablas con su correspondiente cepillado, para perfeccionar la unión habrá que tener especialísimo cuidado de asegurarse que las tablas estén dispuestas todas ellas en la misma dirección con respecto a los anillos: todas las tablas ensambladas darán por el anverso la parte convexa y por el reverso la parte cóncava . Si las tablas estén encoladas pero no están dispuestas en la dirección debida la madera “tirará” deformando el conjunto.
El iconógrafo no especializado en estos trabajos de carpintería deberá tener especialísimo cuidado en el empleo de la maquinaria ya que puede presentar peligros en su utilización o bien adquirir las tablas ya preparadas. Es aconsejable para los que no puedan preparar sus propios soportes adquirirlos de carpinteros-ensambladores especialistas en iconos. Estos profesionales seleccionan las maderas mas apropiadas, normalmente el tilo, sin nudos y con el proceso de secado indicado, las ensamblan adecuadamente y trabajan las los travesaños y lengüetas con arreglo a normas precisas.
1.4.2.- TRAVESAÑOS
Las tablas tienden a curvarse debido a varios factores (la temperatura medio ambiente, las humedades producidas por la aplicación del levkas,bol, por el propio secado de la tabla, etc.).
La curvatura suele repercutir negativamente en las capas de yeso y por tanto en la pintura, como en el dorado con la consecuente aparición de grietas como se ve en la siguiente imagen:
Para evitar en lo posible este proceso de deformación se ha procedido desde antiguo a reforzar la tabla con travesaños de una madera más dura.
Los travesaños se empleaban para reforzar lo mejor posible la unión de distintos listones de madera y la de prevenir el alabeo de la tabla.
Observando iconos antiguos comprobamos fácilmente como con el paso del tiempo los travesaños han producido el efecto contrario para el que fueron empleados. Los travesaños suelen salirse de su lugar dejando espacios apreciables entre ellos y la tabla.
También se puede apreciar como, a pesar de los travesaños, la madera se alabea y como se han desunido las tablas por lo que a veces se refuerzas las uniones con grapas, como se puede apreciar en las siguientes imágenes:
El tipo de travesaño más común es el llamado de media cola de milano por tener la mitad de la forma característica que hemos apreciado en el apartado anterior del ensamblaje por colas de milano.
Estos travesaños van incrustados en los surcos que se hacen en la tabla. Surcos que se han comprobado que sí reducen la tensión de alabeo de de la madera por disminuir la superficie más cercana al exterior del tronco que es la que “empuja” a los anillos hacia la parte cóncava.
Los travesaños de media cola de milano presentan diferentes acabados en la superficie exterior como apreciamos en los siguientes esquemas:
Y en las siguientes imágenes:
Una vez trabajados los surcos se introducen los travesaños con la ayuda de un mazo de carpintero.
Como hemos indicado anteriormente los travesaños no cumplen con la funciones que se les asignaron cuando se comenzaron a emplear. No obstante, se continúan empleando ya que cumplen una función tradicional- estética.
Observamos en algunos comercios que se expenden tablas contrachapadas para un pretendido empleo de iconos y sin embargo son de ínfima calidad debido a:
- El contrachapado no se alabea por lo tanto es inútil el poner travesaños.
- Los travesaños de esta tabla ni son de forma cónica ni van incrustados en la madera (por otra parte el contrachapado no se puede cavar por lo que sería inútil intentarlo).
- Estos travesaños van sujetos con clavos (los clavos se oxidan fácilmente).
- Los travesaños, por el pequeño tamaño de la tabla, no hubiesen sido necesarios aunque se tratara de madera maciza.
- Su tamaño es desproporcionado a la tabla.
Durante los primeros siglos se cavaban los bordes de los iconos formando lo que recibe el nombre de cofre al que limitaban los bordes. A partir del siglo XIV se comenzaron a emplear los bordes pintados debido al empleo de la técnica rusa.
El borde del icono representa a la humanidad y el interior, la parte central, lo sacro. Por tanto el principal sentido del borde no es el de enmarcar decorativamente la imagen sino expresar plásticamente que el contenido del icono es algo que perteneciendo a una realidad sobrenatural está en contacto y se introduce en nuestra realidad humana (expresada con el desbordamiento de las aureolas en los bordes). Que las aureolas de Jesús, la Virgen o Santos salgan parcialmente ocupando parte de los bordes no se debe a un error de cálculo de dimensiones sino a expresar simbólicamente que la divinidad ha entrado en nuestra humanidad.
Por consiguiente, los bordes son elementos característicos de los iconos, si bien podemos diferenciar los iconos rusos (con bordes cavados) de los griegos (con bordes pintados).
Los bordes que nos proporcionan más trabajo son los cavados pero son los más convenientes, no ya desde un punto de vista simbólico o estético, sino debido a una cuestión práctica: si se cava la tabla se evita el alabeo.
En efecto, si hacemos que la parte convexa (más húmeda) tenga menos superficie que la cóncava (más seca) llegaremos a compensar este exceso de humedad que tiene una cara con respecto a la otra reduciendo su superficie húmeda.
Los iconos rusos son pintados sobre plano ya que su pequeño tamaño y la técnica del glaseado así lo requiere (ver el punto 2.1.1. en el apartado de la pintura). Se pinta apoyando la mano sobre una regleta que a su vez descansa en los bordes cavados para de esta forma no estropear la pintura.
Utilidad de los bordes cabados: además de evitar el alabeo facilita la pintura al “charco” de la técnica rusa empleando una regleta o tablilla que apoyándose en los bordes nos facilite el trabajo de pintura sin tocar la misma.
1.5.1.- TIPOS DE TRAZADOS DE BORDE
1.5.1.1.- BORDES TRAZADOS CON LA MISMA ANCHURA EN LOS 4 LADOS
1.5.1.2.- BORDE INFERIOR MAS GRUESO QUE LOS DEMAS
1.5.1.3.- BORDES SUPERIOR E INFERIORE MAS ANCHOS QUE LOS LATERALES
Este tipo de bordes es el que recomendamos (la escena del icono no aparece tan alargada, para determinadas composiciones resultan más armónicas la medidas, vemos este tipo de bordes en los iconos tradicionales). Para realizar este tipo de bordes tendremos en cuenta que cada borde lateral será la décima parte de la anchura total del icono. Por ejemplo, si una tabla mide 40 cm. de ancho los bordes laterales medirán 4 cm. El borde superior e inferior del icono se calcula trazando las diagonales de la tabla y allí donde se cortan con la línea de los bordes laterales es donde se procede al trazado de los bordes superior e inferior según mostramos en la siguiente imagen:
Los bordes pueden ser pintados. Los iconos griegos por su mayor tamaño y la técnica del brocheado se pintan sobre caballete y el apoyo de la mano se realiza sobre una varilla que a su vez viene protegida por un paño que apoyamos en la obra.
1.5.2.- CAVADOS
Las herramientas empleadas para el cavado de la tabla hasta que comenzó a emplearse la fresadora en el siglo XIX eran el formón y mazo de carpintero.
Una vez señalado el borde con las debidas medidas se clavan dos listones de madera para que repose con total seguridad la base de la fresadora que vamos a utilizar a continuación.
Con esta herramienta eléctrica labramos la tabla una vez que hemos señalado los bordes. La fresadora contiene la denominada fresa que con su movimiento giratorio va labrando la madera.
Debemos tomar todas las precauciones para evitar accidentes:
- Emplear la >fresadora siempre con las dos manos, desenchufarla en cuanto terminemos el trabajo.
- No tirar del cable.
- No situarla cerca de fuentes de calor o/y humedad.
- Usar mascarilla y gafas.
- Desmontar la fresa al terminar.
- No ejercer mucha presión.
- Trabajar parejamente etc.
ATENCIÓN: Recomendamos no emplear la fresadora sin el asesoramiento de un artesano o profesional experto.
No todas las fresadoras son igualmente aptas para nuestro quehacer. Debemos tener en cuenta:
- Que tengan regulación electrónica de sus velocidades y de esta manera nos adaptaremos a la dureza de la madera a emplear.
- Como no empleamos materiales duros, D.M., nos será suficiente una potencia de unos 500 w.
- El peso de la máquina que recomendamos es entre tres y cuatro kilos. Cuanto más pesada sea será aportará más estabilidad y cuanto más ligera sea. Si elegimos una máquina pesada será más estable y si la elegimos más ligera será más fácil de manejar.
- No necesitaremos una fresadora con corte de gran profundidad pero sí comprobar que la guía de la rofundidad presente un buen ajuste.
La tabla tiene que estar fuertemente sujeta a la mesa mediante un gato-sargento. Los listones de madera (que vemos en la imagen con un color más oscuro que la tabla y sobre los cuales se desplaza la fresadora) deben estar bien clavados a la tabla. De no seguir las normas de seguridad nos expondremos a graves accidentes.
Una vez finalizada esta primera parte se desmontan los listones y el gato sargento para situarlo en la parte opuesta y de esta manera proceder al cavado de la segunda parte de la tabla.
Una vez cavado el espacio que vemos en la imagen anterior (el que permite la dimensión de la máquina) se desmonta el listón para situarlo el la parte que ha quedado sin cavar y proceder a continuar el trabajo en esta parte.
En la actualidad empleamos la fresadora para el cavado y lo terminamos con el formón y mazo de carpintero (como vemos en la imagen).
En medio de la tabla quedó en relieve un listón que debemos quitar mediante el formón y el mazo de carpintero. Las desigualdades del acabado con formón se lijan a mano para dejar la superficie lo más pareja posible. Se finaliza el cavado de la tabla lijando los ángulos con la lijadora de punta.
1.5.3.- BORDES PEGADOS O FALSOS BORDES
Si no queremos cavar la tabla podemos valernos de tiras de madera que pegaremos a la misma formando un cofre por medio de lo que llamamos “falsos bordes”.
Estos bordes , al igual que los cavados, facilitan el proceso de pintado del icono al poder apoyar la mano en una regleta colocada sobre los mismos.
Los materiales que necesitaremos para este trabajo son: un serrucho japonés, una escuadra, lija, pegamento y lápiz.
Medimos la anchura de los falsos bordes a colocar teniendo en cuenta que muy a menudo los superiores e inferiores son de mayor anchura que los laterales. Además de medición, la escuadra cumple una función de trazado por la que señalamos en la tabla la situación de los bordes.
Esta herramienta es fácilmente transportable y está provista de un nivel en el extremo. Al formar ángulos de 90º las esquinas de la tabla tenemos que cortar listones de 45º cada uno para poder formar el rectángulo.
Para el ensamblaje de los cuatro listones de los falsos bordes trazamos sobre cada uno de ellos dos ángulos de 45º de una manera sencilla.
Si queremos cortar listones a bisel en inglete podemos utilizar la ingletadora que es una pieza de madera con unas ranuras en la que introducimos un serrucho de costilla y de esta manera efectuamos los cortes de los listones en un perfecto ángulo de 45º.
Existen ingletadoras eléctricas que no solamente cortan a bisel sino que hacen ranuras y cortan tableros con gran precisión. Nosotros no necesitaremos este tipo de máquinas ya que nos será suficiente con la sencilla pieza de madera que mostramos en la imagen.
Después de el cortado y para que encaje perfectamente con el otro listón procedemos al lijado. Comprobamos las medidas de los listones.
Tradicionalmente se viene empleando la cola de conejo aunque en la actualidad se pueden emplear colas de contacto con un excelente resultado. Una vez unidos los listones y para evitar cualquier movimiento de los mismos y su correcta adherencia podemos emplear en su intercesión un sargento para marcos.
Inmediatamente de haber pegado las juntas se procede a lijar las mismas con una suave lija para dejarlas lo más homogéneas posible. Al mezclarse el “serrín” con la cola quedarán las juntas uniformemente unidas y sin asperezas.
En grandes almacenes de bricolage podemos adquirir para nuestros pequeños iconos (las medidas de estos listones no da para más) listones preparados. Alguno de ellos se nos presentan labrados con dibujos clásicos por lo que se podrán adecuar a nuestro trabajo facilitándonos la tarea de pintarlos, si así nos parece, en el acabado del icono.
1.5.4.- BORDES PINTADOS
Si no hemos cavado los bordes o no hemos puesto falsos bordes con regleta, la tercera opción que tenemos es pintarlos. La pintura se hará delimitando el grosor de los mismo según las normas generales referidas a los bordes (ver apartado 1.5).
Aunque los bordes es lo último que se pinta, en la imagen aparecen pintados para poder apreciar con claridad, en este caso, que no siempre todos tienen el mismo grosor ya que a veces no conviene “rectangularizar” demasiado la imagen. En el espacio en blanco es donde situaremos nuestro dibujo para proceder al dorado y pintura.
1.6.- MODELOS DE TABLAS
Sugerimos para la adquisición de madera tratar directamente con los almacenistas que nos podrán dar una información más próxima de la clase de madera, de su procedencia, su proceso y estado de secado, calidad, dureza, veteado, predisposición al alabeo, etc.
En nuestros talleres nos será fácil preparar y cortar las tablas, poner los falsos bordes y demás trabajos sencillos con ayuda de un mínimo de herramientas y maquinaria.
Para trabajos más complicados como el de calados de tablas podremos contar un carpintero de confianza que siga nuestras instrucciones.
Lo que sí resulta muy interesante es acudir, si nos es posible, a la ayuda de un artesano iconógrafo especialista en la construcción de soportes. La variedad de modelos con la que podemos trabajar está al alcance de todos nosotros con sólo consultar la bibliografía iconográfica. He aquí alguno de estos modelos de tablas: